La verdad sea dicha, lo sé ahora que me lo has dicho. Hitchens habrá sido lo que haya querido, pero soy de los que opino que, el movimiento se demuestra andando y su confesión no forzada me suena antimarxista, esto es lo mismo que cuando alguien deja de fumar, se convierte en un fanático antifumadores. Jiménez de los Santos, Sánchez Drago, Josep Piqué, Pio Moa,etc. también fueron militantes del PCE y mírales ahora. Solo existe una Familia verdadera, la socialista del PSOE, ¡ojo!... mientras sigan gobernando, sino ya se sabe, todos a por la herenciaShé escribió:
Hitchens sí debe estar algo más que familiarizado con el marxismo. Perteneció al grupo post troskista Luxemburguista, seguidores de Rosa Luxemburg.
Rosa Luxemburg, como sabes sin duda mejor que yo, fue cofundadora de la Liga Espartaquista que luego derivó en el Partido Comunista alemán. Se convirtió en un icono para los social demócratas y los marxistas, tras su asesinato junto con el cofundador Liebknecht y otros seguidores del partido por parte de las milicias de derecha que defendían la República de Weimar, en 1919.
Te puntualizo; el nombre Espartaquista (ahora suena fatal) se puso en honor a Espartaco (liberador de los esclavos de Roma) no por Esparta (polis de la antigua Grecia). Por otro lado, sí conozco su obra y su vida (una gran revolucionaría en lo teórico y lo práctico), pero tienes un pequeño error, te pego la reseña para abreviar; “El 1 de enero de 1919, la Liga Espartaquista/KPD ejecutó una revolución comunista de breve duración en Berlín, aún contra las protestas de Luxemburgo y de Liebknecht, quienes argumentaban que la rebelión era débil y que no contaban con el apoyo total de la clase obrera. La revolución (luego conocida como levantamiento espartaquista) fue derrotada por las fuerzas combinadas del Partido Socialdemócrata de Alemania, los remanentes del ejército alemán, y de los grupos paramilitares de extrema derecha conocidos como Freikorps, a las órdenes del canciller Friedrich Ebert. Luxemburgo y Liebknecht, entre muchos otros, fueron masacrados por los Freikorps, y sus cuerpos arrojados al río. Centenares de Espartaquistas fueron ejecutados en las semanas que siguieron a la sublevación. Los restos de la Liga se disolvieron en el Partido Comunista de Alemania (KPD) que conservó el periódico de la liga, Die Rote Fahne (La Bandera Roja), como su publicación”. Los social demócratas (llamados también los "cangrejos rojos", por eso de que iban hacía atrás), los traicionaron.