Onda-corpúsculo, un concepto enigmático para la ciencia

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eduardo dd
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Onda-corpúsculo, un concepto enigmático para la ciencia

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Onda-corpúsculo, un concepto enigmático para la ciencia

La dificultad de concebir válidamente la entidad básica de la mecánica cuántica hace necesario acudir a otras formas de pensamiento lógico.

Paradójicamente, la mecánica cuántica, teoría científica que más resultados prácticos ha dado en la historia, es la que mayores problemas conceptuales presenta para los científicos. Quizá el más importante de todos ellos sea el enfrentarse filosóficamente a la entidad fundamental de este nuevo mundo: la partícula cuántica, con su doble naturaleza corpuscular y ondulatoria, parece pulverizar principios lógicos perfectamente asentados, lo que hace necesario conceptualizarla de manera diferente a las entidades clásicas. Posiblemente, la lógica hegeliana pueda ayudar a construir un nuevo sistema conceptual para la ciencia.

La partícula cuántica

Alejándose de la ontología de la física newtoniana, en la que las partículas básicas, siendo entidades discretas y localizables de una manera precisa a las que se les puede aplicar leyes de carácter determinista, la mecánica cuántica asume la existencia de entidades que conjugan el carácter anterior con el fenómeno ondulatorio. La onda-corpúsculo aúna la entidad clásica antes descrita con la onda, fenómeno deslocalizado y continuo. Por así decirlo, una y otra cualidad al mismo tiempo.

Formalización matemática

Dicho estado queda formalizado en la ecuación fundamental E=hv, en la que E representa la energía de la partícula, considerada como corpúsculo, v representa su frecuencia, en consonancia con su caracterización como onda, y h es la constante universal del Planck. Se deriva de tal formulación que la naturaleza ondulatoria quedará relacionada de manera directamente proporcional con su naturaleza corpuscular.

Problemas experimentales: la medición.

Tal naturaleza de las entidades clásicas plantea una gran problema científico: el carácter deslocalizado de la entidad, el no ocupar un lugar preciso en el espacio, hace que no sea susceptible de medición precisa en un momento dado; por ende, tampoco puede ser aplicadas las leyes deterministas propias de la mecánica clásica.

Problemas conceptuales: el principio de no contradicción.

Asimismo, la partícula cuántica choca conceptualmente con uno de los principios clásicos de la lógica aristotélica, lo cual redunda en una profunda falta de compresión. Según el principio de no contradicción, la misma cosa no puede ser y no ser al mismo tiempo. Así, la entidad cuántica no podría ser un corpúsculo, localizable en el espacio, y una onda, no localizable; no puede ser una entidad discreta y, de la misma forma, continua; no puede, por último, ser una entidad medible y no medible.

Este problema ha supuesto un escollo, no ya solo para la posibilidad de representación mental de esta realidad, sino para la elaboración modelos científicos válidos. La comprensión corriente puede captar la identidad, la diferencia y la contradicción, pero no así el paso de lo uno a lo otro, que es lo más importante, cómo lo uno se convierte en lo otro.

La dialéctica hegeliana

Para Hegel, sin embargo, el acto mismo del conocimiento es la incursión de la refutación. En el principio de no contradicción, la proposición algo o es A o no es A, implica en sí misma una contradicción: A debe ser +A ó -A, con lo que queda introducido el tercer término, A, que no es ni + ni – y, por lo mismo, es las dos cosas a la vez. Toda entidad es ella misma y, al tiempo, no lo es; sufre un cambio y se transforma en otra cosa. Esto significa la superación de la lógica formal de corte aristotélico y el establecimiento de la lógica dialéctica.

Momentos dialécticos

La lógica hegeliana queda jalonada por tres momentos dialécticos con configuran una unidad. a- De suyo: inmediatez de la entidad en la que se haya implícita su naturaleza. b- Para sí: negación del momento anterior, explicitación de su naturaleza. c- De suyo y para sí: una vez negado el primer momento, retorna a sí ya mediado por el movimiento anterior.

¿Una nueva axiomática?

El concepto de onda-corpúsculo parece ser más asimilable epistemológicamente a partir de la dialéctica hegeliana. De esta forma, se podría identificar la naturaleza corpuscular de la partícula cuántica con el primer momento dialéctico, de suyo, al constituirse aquella como un estado estático. Tal estado quedaría contradicho con la naturaleza ondulatoria de la entidad, identificada con el momento negativo de la triada hegeliana, para sí, por representar este el movimiento inherente a aquella. La unidad insoslayable de ambas naturalezas, de ambos momentos, quedarían expresadas por el último jalón de la triada, de suyo y para sí, en el que lo implícito inmediato quedaría ya mediado por su contradicción.

Un modelo válido

Evidentemente, la dialéctica hegeliana se prestaría para elaborar un modelo científico válido para representar una realidad, la onda-corpúsculo, difícilmente imaginable por una mentalidad acostumbrada a la utilización cotidiana del principio aristotélico de no contradicción. Tal sería necesario como puente epistemológico entre la teoría axiomatizada y la realidad a la que se aplica.

Dificultad de medición.

Sin embargo, tal modelo, tal modo de concebir la realidad, no soslayaría de por sí la problemática de la medición. La partícula cuántica seguiría adoleciendo empíricamente de una localización determinada desde la que se pudiera efectuar tal medición y, por ende, aplicar un el complejo de leyes deterministas propias de la mecánica clásica.

Evidentemente, a modo de conclusión, aplicar la dialéctica hegeliana a la problemática del concepto onda-corpúsculo resulta tentador, no solo por la necesidad de encontrar sistemas conceptuales válidos en los que subsumir los fenómenos empíricos, o por la de construir modelos científicos a partir de los que bien se desarrollen nuevos constructos teóricos, bien sirvan de vínculos epistemológicos entre la teoría y la realidad, sino por el mero hecho de intentar encontrar otras formas de pensamiento científico válidas para el futuro.



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